Por
Héctor Salinas Castellanos
Comunicador
Social y Periodista
Docente
UPTC
Antes
de comenzar a hablar de este trascendental tema, es necesario precisar que la
lectura de textos no es la decodificación de símbolos lingüísticos sino la
interpretación real de las ideas y de los pensamientos de los escritores. Es muy cierto que cada persona interpreta un
texto de acuerdo con su perspectiva y su visión de mundo, pero la gran verdad
es que así como los acontecimientos tienen diferentes perspectivas y por ende, variadas
maneras de ser percibidos, existen elementos que permiten dimensionar, de una
forma más aproximada, las expresiones escritas y los sucesos.
Para interpretar las historias y los acontecimientos que se relatan en
los libros no basta con establecer el significado literal de cada una de las palabras
con las que se construye el texto y el discurso, sino que hay que tener en
cuenta otros factores muy importantes que aportan significado. Pero sin duda el
lenguaje y el contexto en que producen los actos comunicativos juegan un papel muy importante para comprender.
El lenguaje es decisivo en el desarrollo del ser humano y considerado un instrumento imprescindible del
pensamiento. Gracias al lenguaje el ser humano puede
dimensionar no solo su entorno sino el mundo. Lev Semiónovich
Vygotsky, uno de los máximos exponentes de la psicología del desarrollo y
fundador de la psicología histórico-cultural señala sobre el particular: “El lenguaje es la materia prima para la construcción del pensamiento e
instrumento esencial del desarrollo intelectual, que se adquiere en la
comunicación. “Pensamos
con palabras”.
Leer y
escribir, significan lo mismo: pensar. El pensamiento vive a través de las
palabras y el desarrollo del pensamiento está determinado por las palabras. Gracias a las palabras imaginamos y construimos
las ideas.
La comprensión de los textos le exige al lector desprenderse de tradiciones; dejar
de lado las posiciones personales; evaluar todas las opiniones; relacionar situaciones; comparar; contrastar;
valorar las tesis; distinguir entre lo general y lo específico; identificar hechos
y situaciones significativas; no imponer criterios; no hacer prejuicios,
y en fin, analizar todos y cada uno de los aspectos a que haya lugar dentro del
texto.
La
gran dificultad en la comprensión es que los lectores
visualizan desde diferentes contextos y esto hace que no interpreten de igual
forma las mismas situaciones y los mismos aspectos que conforman un escrito o
una obra literaria.
Para interpretar, hay que tener en cuenta que tanto
los objetos como los acontecimientos tienen diferentes caras. Protágoras, decía
que “todo asunto tiene varios lados”, y esto se percibe en los objetos, en las
palabras, en los textos y en todas las circunstancias de la vida. El tema de la
paz, puede interpretarse desde varios contextos: La paz política, la paz
positiva, la paz estructural, la paz sin armas, la paz con justicia social, la
paz familiar, la paz emocional, la paz espiritual, etc.
Al igual que sucede con las palabras que adquieren significados de
acuerdo con la perspectiva en que aprecien, así mismo, ocurre con los
acontecimientos que se conciben según la perspectiva social, cultural,
histórica, de tiempo y lugar en que sean analizados. El mundo evoluciona y así
mismo el ser humano está percibiendo la vida de forma diferente. El desarrollo tecnológico ha revolucionado al
mundo científico y por esta razón, muchas
teorías han tenido que ser replanteadas. El acelerado avance de las tecnologías
de la información y la comunicación ha influenciado el pensamiento del ser
humano mostrándole visiones diferentes que han conllevado grandes cambios
culturales e incluso el fin de muchas culturas.
Todo suceso o hecho genera distintas interpretaciones. Un caso que
resulta muy particular y exclusivo por la infinidad de ideas que existen en
todo el mundo, lo constituye la
interpretación que tiene la humanidad acerca de Dios. Su denominación tiene en los distintos
países del mundo una connotación y por ende una interpretación distinta. En la
India, se representa a más de trescientos millones de Dioses, lo cual demuestra la inmensa cantidad de interpretaciones y
concepciones acerca de Dios. http://elcontextoenlaexistenciadedios.blogspot.com/
El contexto juega un papel muy importante en los significados que
adquieren los actos comunicativos y por esto se constituye en la columna vertebral
de la comprensión.
Todo lo que gira alrededor de un evento hace parte del contexto, su
entorno físico y cada uno de los aspectos desde los cuales se considere un
hecho.
El
contexto es el eje alrededor del cual gira todo el engranaje del
mundo de la comprensión; tiene en cuenta todas las circunstancias de diferente
índole en que se suceden los acontecimientos como: las culturas, la historia,
los lugares geográficos, las situaciones de orden político, los tiempos, el
pasado y el presente.
Existen
muchas técnicas y estrategias para comprender escritos pero sin duda el factor
que juega un papel importante en la interpretación es el contexto; éste determina
no solo el significado de los escritos, sino de todo cuanto ocurre.
La palabra corona
es otro gran ejemplo que muestra que un vocablo adquiere diferentes
significados según la circunstancia en que se encuentre:
Desde los símbolos
del sistema de gobierno monárquico, la corona representa poder.
Dentro
del contexto astronómico, “corona” es un anillo coloreado que en
ocasiones rodea el Sol o la Luna: la corona solar puede observarse
cuando se produce un eclipse total del Sol”
Corona,
es una palabra utilizada cuando alguien obtiene un logro. “La atleta corona su aspiración de
convertirse en la campeona”.
La moneda de Suecia, Dinamarca y Noruega es la
corona. http://www.wordreference.com/es/en/translation.asp?spen=corona
Desde otros
contextos, corona representa el eje
central de un elemento o pieza mecánica; la parte esmaltada de un diente; un
aro de flores o corona utilizada en funerarias y cortejos fúnebres; la parte
superior de una columna que soporta el fuste y sobre el cual descansa
el arquitrabe; la corona del sol, la aureola de las
imágenes santas, superficie comprendida entre dos circunferencias, piezas mecánicas de
bicicleta, marcas de productos comerciales; corona de engranaje de
vehículos, motores y aparatos.
El
contexto es tan importante porque no solo define el significado de las
palabras, los escritos y los acontecimientos, sino que en algunas situaciones,
lo transforma totalmente. La frase célebre: “Dios no juega a los
dados”, del científico Albert Einstein”, es un claro ejemplo de la forma
cómo el contexto varía notoriamente el significado de las palabras.
En un
sentido estrictamente literal, la frase “Dios no juega a los
dados” no es lógica, al no ser que Einstein, hubiese comprobado las
predilecciones de Dios en materia de juegos. Por tal razón, la
palabra juega, en esta frase, no simboliza juego o diversión,
sino riesgo. Ahora bien, los dados no son esas fichas que todos
conocemos, éstos representan en la frase, el azar o la suerte.
Así
las cosas, una interpretación aproximada de la frase: “Dios no juega a
los dados”, es: Dios no arriesga nada, todo lo tiene perfectamente
predestinado, sus obras no dependen de la suerte.
Bien.
Hay situaciones y casos especiales en
que el contexto modifica totalmente el significado de las palabras hasta el
punto de llegar a interpretar algo totalmente opuesto.
En la
frase: pobres ricos, ricos
pobres, se manifiesta este fenómeno. Veamos: No se puede hablar de pobres
y ricos económicamente a la vez, o de ricos y pobres económicamente al mismo
tiempo, por lo tanto, la frase pobres ricos, ricos pobres adquiere un contexto simbólico.
En la
primera parte de la oración: “pobres ricos”, la palabra pobres,
se enmarca dentro de un contexto económico; pero ricos, no. En consecuencia la palabra ricos adquiere un
significado diferente, pues, deja de estar dentro de un contexto económico y pasa
a un contexto simbólico, es decir, otro tipo de riqueza. En este caso particular, la riqueza podría
interpretarse dentro de un contexto de felicidad. Así las cosas, la interpretación
con más sentido en esta primera parte de la frase es pobres felices.
Y en
la segunda parte de la oración, es decir, ricos pobres, la palabra
ricos se encuentra dentro de un contexto económico, pero pobres adquiere un
contexto simbólico. Desde una perspectiva económica, la frase ricos
pobres sería paradójica e incoherente.
Ahora
bien, teniendo en cuenta que la palabra pobres no se enmarca
dentro de un contexto económico es obvio que esta palabra adquiere otra
dimensión; por lo tanto, es otro tipo de pobreza. En este sentido esa pobreza
podría contextualizarse como infelicidad. Por tal razón, la interpretación más
aproximada, sería: ricos infelices.
La
interpretación completa de la frase: “pobres ricos, ricos pobres”, es: pobres
felices y ricos infelices.
Todo
asunto tiene varios lados y cada uno de ellos genera visiones y puntos de vista
diferentes, así son las palabras, las oraciones, los escritos y las formas de
comunicación oral y verbal. No todas las personas visualizan los
acontecimientos de la misma manera. No todos piensan igual que los líderes
mundiales o como las más reconocidas figuras públicas: Así como hay adictos hay
detractores. No todos los adultos interpretan igual, no todos los niños piensan
lo mismo.
Muchos
autores coinciden en afirmar que hay textos que exigen al lector mucha
dedicación para entenderlos. Señalan que se necesita ir muy despacio para poder
asimilar con el suficiente tiempo cada una de las partes que conforman un
escrito. La gran condición para entender bien un texto es no estar de afán.
Técnicas para la mejorar comprensión lectora
·
Activar conocimientos acerca del tema que se
va a leer.
·
Establecer claramente qué es lo que se quiere
saber o conocer.
·
Hacer una pre lectura
muy rápida acerca del autor; el año en el que fue escrito; el índice o tabla de
contenidos, comentarios editoriales, etc.
·
Establecer el tipo de
texto; es decir si es un ensayo, una novela, una crónica, un escrito
científico, una opinión, una tesis, una noticia, un análisis, etc.
·
Averiguar el significado de los términos
desconocidos.
·
Comenzar a
identificar la idea central del texto partir de la lectura del título como
también de los primeros párrafos, subtítulos, capítulos.
·
Hacer una lista de las ideas que se consideren
más importantes.
·
Relacionar algunas ideas
con el tema central o el título del escrito.
·
Tener en cuenta las palabras claves ya
que éstas por lo general se relacionan con el tema central del escrito y
aportan orientaciones valiosas.
·
Tener muy en cuenta
las ideas secundarias ya que éstas refuerzan las ideas principales. Las
ideas secundarias juegan un papel importante porque dan sentido a las ideas principales
y ofrecen un gran contenido semántico. Las ideas secundarias dan los
detalles del asunto del párrafo, justifican, explican, detallan o ejemplifican
lo dicho en la principal.
·
Analizar el conjunto de ideas principales y
su relación con la idea central, las partes que lo conforman, cómo y para qué
se relacionan entre sí.
·
Hacer una lectura por
párrafos: Si no se entiende en primera instancia, relacionar lo que se
perciba con la idea central pre establecida como resultado de la pre lectura y
con nuestros conocimientos previos.
·
Elaborar un mapa conceptual, pues este nos muestra las relaciones
entre las ideas principales y las secundarias de un modo amplio. Éstos acentúan
visualmente tanto las relaciones jerárquicas entre conceptos y proposiciones.
·
Parafrasear. Expresar con sus propias
palabras lo que se ha entendido del tema.
·
Formularse el mayor número de preguntas
acerca del tema. Esto ayudará no solo a generar el propio interés por la
lectura sino a establecer qué sabe, que habrá hecho falta, que sobra y sobre
todo, cual podría ser su aporte.
·
Establecer el contexto del escrito; es decir
el aspecto desde el cual se aborda el tema; las circunstancias de índole
social, cultural, histórica y en fin, todo tipo de relación con el tema, su
incidencia y su significado.
·
Establecer el propósito del autor ya que esto
ayuda a ubicar el contexto lo cual le facilitará la comprensión del escrito.
·
Hacer resúmenes de lo que se vaya
comprendiendo del texto.
·
Comparar y contrastar los conocimientos adquiridos
con los conceptos nuevo, esto permitirá
ir construyendo nuevos conocimientos.
·
Despejar dudas de todo tipo, no solo
semánticas o de significado, sino de contenido.
·
Leer los fragmentos o los párrafos del texto
cuantas veces sea necesario hasta entenderlo claramente; pues hay que
determinar dónde está la dificultad para comprenderlo. Mientras no aclaremos cualquier
duda, no la podremos interpretar.
·
Tener muy clara la
diferencia entre un texto simbólico y un texto literal. Los textos simbólicos
cambian su significado según el contexto.
·
Separar las opiniones de las ideas. No es lo
mismo una posición personal que una idea bien expuesta y soportada en hechos verídicos.
·
Diferenciar entre lo general y lo específico.
En todas las disciplinas del saber y en todos los acontecimientos de la vida,
hay un eje central alrededor del cual giran muchas cosas. En los textos ocurre
lo mismo, hay temas con variados enfoques, perspectivas y contexto. Hay
ideas muy importantes, pero su plena comprensión depende de la interpretación
correcta que se haga de otras ideas.
·
Abstraer; crear una síntesis mental de los
aspectos básicos del texto con el propósito de comprenderlo bien y de esta
forma poder diferenciar claramente cada una de las ideas.
·
Imaginarse lo que viene ayuda en buena medida
a generar expectativa y a compenetrarse con el tema.
·
Concéntrese para no salirse de contexto, ni alejarse
de la realidad del tema.
·
Auto evaluar lo aprendido. Preguntarse ¿Qué
he aprendido?
·
Interactuar con el texto.
·
Desarrollar nuevas ideas y conceptos a
lo largo de la lectura.
·
Inferir o deducir es
un ejercicio muy recomendado por los especialistas de la comprensión textual. No
se trata de suponer sino de advertir lo que pueda ocurrir. Con toda razón se
indica que la inferencia es el alma de la comprensión.
·
Subrayar es una buena forma de resaltar las ideas más importantes: Las ideas principales
deben ir resaltadas con un color o un tipo de línea que lo diferencie de las
ideas secundarias o complementarias.
·
Analizar la estructura
del texto, es decir, el conjunto de conexiones organizadas, elementos
relacionados en un todo. En un texto, hay elementos: introducción, desarrollo y
conclusión y están organizados y relacionados. Una buena estructura es aquella
que está concebida como un todo; una unidad cuyos componentes o elementos están
dispuestos de una manera determinada, donde el todo es mayor que la suma de sus
partes.
Ø
Introducción: Contiene
el propósito del autor, los antecedentes o circunstancia de lo escrito,
la tesis o idea central y su alcance.
Ø
Desarrollo: Es el
elemento fundamental del escrito en el cual se argumenta y se explica la idea
concreta expresada en la introducción. El autor amplía su tesis introductoria,
utilizando párrafos que guarden estrecha relación con esa idea concreta o
tesis, lo cual permite al mensaje llegar al lector con precisión y claridad.
Ø
Conclusión. Se hace un refuerzo de los aspectos más
importantes de su tesis o idea concreta. El autor puede expresar
recomendaciones específicas y propuestas que considere de utilidad para el
lector como reflexión.